La mayoría de nosotros llevamos toda nuestra vida creyendo ser una persona.
La creencia de ser una persona implica que existo como un individuo independiente.
Creemos que existe un Universo independiente y preexistente a nosotros.
Creemos que existe el universo por un lado y nosotros por el otro, que somos independientes uno del otro.
Más no existe independencia, es sólo una apariencia.
Ni tampoco existe preexistencia, ya que el universo surge de ti.
Surge a partir de ti en virtud de la Consciencia Universal que eres. No puede surgir de ti como individuo, pues ningún individuo existe en realidad.
Recuerda, que no eres un cuerpo manifestando Consciencia, sino eres la Consciencia manifestando un cuerpo.
Todos somos la Consciencia Universal, la cual se expresa a través de infinitas formas, incluidas nuestras formas humanas.
Como Consciencia Universal "sueñas" mundos y te sueñas siendo un personaje dentro de estos mundos, donde aparecen "los otros" personajes, a quienes también consideras diferentes y separados de ti y del Universo, sin sospechar siquiera que todos ellos son la misma Consciencia que tu eres.
La Conciencia Universal es la inteligencia, la "fuerza", la "energía", que hace latir tu corazón, que lleva a cabo todos los cientos de procesos biológicos y químicos en tu cuerpo, quién decide todo en ti, incluido el momento en que dejará de latir tu corazón.
Esa vida que te vive, es lo único que existe y es también la única que "piensa y actúa" lo que tu crees pensar y actuar por ti mismo.
Esta fuerza, la cual manifiesta espontáneamente y "de la nada", todas las plantas, todas las flores, todos los frutos, todos los bosques y todo lo que surge dentro del Universo, es la misma fuerza que siembra y cosecha en ti los pensamientos y las acciones, que luego el ego te dice que son tuyos y tú así lo crees.
El ego te dirá que hay algunas cosas que puedes "controlar" y otras que no. Que hay ciertas cosas que no dependen de ti, pero que hay otras ciertas cosas que si dependen de ti. Que debes preocuparte y ocuparte en controlar todo aquello que si depende de ti.
La verdad es que no podemos controlar nada. No te preocupes nunca.
Una de las bendiciones más grandes, uno de los regalos más preciados, una de las tinieblas más densas que disipa la luz del entendimiento, es darnos cuenta que nosotros nunca hemos hecho nada por nuestra cuenta, ni podemos hacer nada, pues no estamos separados ni somos autónomos del poder superior que rige el Universo.
Cuando nuestra intuición recibe esta bendición, se cae por completo toda la pesada carga de culpas y remordimientos que hemos venido acumulando y cargando a lo largo de la vida.
Cuando la Gracia nos toca, somos liberados de la falsa creencia en nuestra supuesta autonomía y no nos queda más que sentirnos profundamente aliviados y agradecidos por no haber podido ser nunca pecadores, ni perpetradores de delito o falta alguna.
La misma Consciencia representa todos los papeles y actúa todos los guiones de los aparentes personajes. Ella es al mismo tiempo la víctima y el victimario. Es tanto el agresor como el agredido, es tanto el violador como el violado. Ella es todos los personajes actuando todos los diferentes roles, dado que no existe nada en el Universo que no sea la Consciencia expresándose a sí misma.
Todos las polaridades, todos los opuestos, todas las rivalidades, son la dinámica de la Consciencia activa, en donde finalmente todos los extremos se juntan, se reconcilian y se unifican.
La Consciencia es activa cuando sueña "el sueño de la manifestación".
La Consciencia activa es el soñador del sueño y el sueño mismo.
Cuando la Consciencia se encuentra activa nosotros somos "Esto". (Todo lo perceptible y quien lo percibe).
Cuando ningún sueño tiene lugar, la Consciencia esta en reposo.
Cuando la Consciencia reposa es una potencialidad latente de manifestación.
Cuando la Consciencia se encuentra inactiva nosotros somos "Eso" (el Ser Absoluto In-manifestado, la Realidad Última).
- "No hay más voluntad que la de Dios",
- "La voluntad de Dios es la mía",
- "Soy un sólo Ser unido a mi Creador",
- "Mías son la paz y la dicha de Dios". (UCDM)
Esta es la clase de entendimiento de quienes han descubierto que no son un personaje dentro del mundo, sino de ambos, la fuente misma.